Hace poco conocí el contorno de ojos de Nuxe, de la línea Bio Beauté, sí, esa que tiene el dibujo de una clementina en su packaging. La verdad es que con este producto tuve una relación, cómo decirlo, ¿mixta? ¿bipolar? Sí, así es. Sucedió que la farmacéutica me dio unas muestras y me sentaron estupendamente bien, los ojos estaban deshinchados, hidratados, una maravilla. Como usaba muy poquito, las muestras me duraron casi un mes. Al cabo de ese tiempo, convencida de que había encontrado otro producto de cabecera (como la loción de Weleda), me dirigí sin ningún tipo de dudas a comprar mi contorno. ¿Y qué pasó? Pues que al salir de la farmacia lo abrí muy contenta y me puse un poquito. Y tuve una reacción (generalmente se me hinchan levemente los párpados inferiores, luego pasa a las dos horas) Si bien sentí algo raro en los ojos en ese momento, no se lo atribuí a la crema (probada ya de sobra) pero al llegar a casa y mirarme bien en el espejo, me di cuenta de que había tenido la típica reacción a algún componente que no puedo identificar pero que aparece en la mayoría de las cremas.
No fui a reclamar a la farmacia porque había tirado el ticket (¿para qué habría de guardarlo, repito, producto probado con creces) Y decidí contactarme directamente con Nuxe para pedir una explicación. He aquí el mensaje que envié y luego comento la respuesta que me dieron.
Respuesta: La respuesta no fue inmediata. Tardaron varios días en responderme. Me dijeron que el protocolo indicaba hablar por teléfono. Hablamos. Nuxe España me dijo que Francia pasa los controles impuestos por la Unión Europea y que los componentes son idénticos. Muy bien, le decía yo, pero científica y lógicamente esto no cuadra. Muestra funciona bien, producto reactiva en la piel. Le expliqué que inclusive tenía pensado hacer un vídeo mostrando el efecto de uno y otro, pero que no estaba tan sobrada de tiempo como para mostrar este fenómeno. La chica, muy amable por cierto, me dijo que lo probara en la muñeca y me dijo que Nuxe me devolvería el dinero. Le dije si no cabía la posibilidad de ¡comprarle muestras!
Antes de devolver el producto, volví a probarlo. En la muñeca no me hizo nada, pero apenas lo coloqué en la cara (ni siquiera lo probé en el contorno sino en la mejilla) la reacción volvió otra vez.
Por más que Nuxe asegure que la composición es idéntica, las pruebas fácticas claramente indican que son casi idénticos, pero exactamente idénticos no.
Conversando sobre este fenómeno en otra farmacia, la farmacéutica me confesó que no es muy inusual que esto suceda, y que a muchas clientas les pasa esto de que a las muestras las toleran y les dan buenos resultados, pero los productos no tanto.
Creo que los laboratorios cosméticos en general no son del todo claros y creo también que no se pueden probar todos los productos sino tandas de ellos.
El razonamiento es muy básico, demasiado elemental. Muestra funciona y no reactiva. Producto reactiva. Si A (muestra) da como resultado B. Y otro supuesto A (producto) da como resultado C, estamos ante un problema. Probablemente A (producto) no es tan A(muestra) como parece. El único modo que tengo de probarlo es con hechos reales, más allá de lo que indiquen en el etiquetado.
Para resumir debo decir que Nuxe presta un excelente servicio de atención al cliente en cuanto a asesoramiento e información.
¿Os ha pasado alguna vez que las muestras os gustan y los productos no? ¿Con qué marcas?
Gracias por pasar por aquí.